Hemos estado en Alemania recorriendo y conociendo durante 11 días Munich y Baviera. Aquí os dejamos lo que más nos ha llamado la atención.
En próximas entradas os contaremos las peripecias de cada día, pero hemos recogido en esta entrada lo que nos ha resultado más curioso ... y no siempre han sido las cervezas.
El país de las bicicletas
En un país donde el uso de la bicicleta está totalmente extendido, hay bicis por todos lados, y tanto jóvenes y mayores la usan. También hay que reconocer que las calles y las carreteras están preparadas para el uso de la bici. Toda carretera, tiene paralelo a ella (pero separado) un carril bici y todas las calles de las ciudades tienen la acera, el carril bici y por último la calle.
Como regla general recordar, si vas con el coche y te encuentras con una bici, el ciclista tiene preferencia.
No hay límite de velocidad en las autovías
En muchos tramos de autovía no existe límite de velocidad, el límite lo pone la potencia del coche y la sensatez o insensatez del conductor. Más de un BMW nos adelantó cuando nosotros íbamos a 130 km/h y nos dio la impresión de estar parados.
También hay que decir que el respeto por las normas de circulación es altísimo. Si en una autovía sin límite de velocidad, hay de repente un cartel con limitación de 80 km/h (por ejemplo por unas obras), todo el mundo va a esa velocidad.
Las botellas y botes se reciclan. ¡Por la cuenta que te trae!
Los primeros días nos dimos cuenta que cada vez que comprabas una botella de agua o una lata de refresco, al lado nos cobraban un suplemento de 25 o 50 cts. Al final descubrimos que en todos los supermercados existen unas máquinas donde introducir tu botella vacía, la máquina detecta el tipo de recipiente y te extiende un recibo por 25 o 50 cts, según la botella, para que lo canjees como descuento en tu próxima compra. Nos dimos cuenta que si te tocan el bolsillo, es la mejor forma de reciclar. Nos recordaba cuando eramos pequeños e íbamos a la tienda del pueblo con el "casco" vacío para poder comprar la siguiente gaseosa y que no nos cobrara el recipiente.
En próximas entradas os contaremos las peripecias de cada día, pero hemos recogido en esta entrada lo que nos ha resultado más curioso ... y no siempre han sido las cervezas.
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| Parking de bicicletas en Munich |
El país de las bicicletas
En un país donde el uso de la bicicleta está totalmente extendido, hay bicis por todos lados, y tanto jóvenes y mayores la usan. También hay que reconocer que las calles y las carreteras están preparadas para el uso de la bici. Toda carretera, tiene paralelo a ella (pero separado) un carril bici y todas las calles de las ciudades tienen la acera, el carril bici y por último la calle.
Como regla general recordar, si vas con el coche y te encuentras con una bici, el ciclista tiene preferencia.
No hay límite de velocidad en las autovías
En muchos tramos de autovía no existe límite de velocidad, el límite lo pone la potencia del coche y la sensatez o insensatez del conductor. Más de un BMW nos adelantó cuando nosotros íbamos a 130 km/h y nos dio la impresión de estar parados.
También hay que decir que el respeto por las normas de circulación es altísimo. Si en una autovía sin límite de velocidad, hay de repente un cartel con limitación de 80 km/h (por ejemplo por unas obras), todo el mundo va a esa velocidad.
Las botellas y botes se reciclan. ¡Por la cuenta que te trae!
Los primeros días nos dimos cuenta que cada vez que comprabas una botella de agua o una lata de refresco, al lado nos cobraban un suplemento de 25 o 50 cts. Al final descubrimos que en todos los supermercados existen unas máquinas donde introducir tu botella vacía, la máquina detecta el tipo de recipiente y te extiende un recibo por 25 o 50 cts, según la botella, para que lo canjees como descuento en tu próxima compra. Nos dimos cuenta que si te tocan el bolsillo, es la mejor forma de reciclar. Nos recordaba cuando eramos pequeños e íbamos a la tienda del pueblo con el "casco" vacío para poder comprar la siguiente gaseosa y que no nos cobrara el recipiente.
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| Jarra de cerveza en una cervecería al aire libre en Munich |
La Cerveza y las salchichas
Todo el mundo bebe cerveza y a cualquier hora del día. Te miran mal si pides una cerveza y el tamaño de la jarra no es por lo menos el "half", es decir 1/2 litro. No entendemos muy bien como aguantan, porque suelen beber sin comida de por medio.
Nosotros necesitábamos acompañar las cervezas con la otra gran tradición Bávara: Las salchichas. ¡Qué buenas están!
Uno de los mayores placeres de los que puedes disfrutar es una buena jarra de cerveza bien fresquita, una salchicha en su pan con su ketchup y mostaza y tomártela en una terraza al aire libre.
"Chimirrutezes"
¿Qué es esto?, es el nombre que le dimos a todas las "pijadas" y regalitos varios que te encuentras por los pueblos de Baviera. Normalmente realizadas a mano y sobre todo trabajadas en madera. Desde adornos para el jardín, hasta los más sofisticados relojes de cuco pasando por todo lo imaginable para decorar tu casa en Navidad.
¡Cómo en España no se come en ningún sitio! Se nos cayo el mito
En Baviera se come muy bien. Fue uno de nuestros grandes descubrimientos. Puedes encontrar por todos lados platos elaborados tanto de carnes como de pescados y a un muy buen precio. Por regla general hemos comido y cenado en restaurantes a un precio más barato que en España.
La gente es amable, pero el "sorry" no existe
Otro de los grandes descubrimientos fue lo amable que es la gente. A cualquier persona que preguntamos o nos atendió, se desvivía por ayudarte.
Otra cosa es pedir disculpas, esa palabra no debe existir en Alemán. Ya te pueden dar el empujón mayor del mundo o chocarte con cualquier persona, que ni se inmutan y por supuesto no hay ningún tipo de perdón que pedir.
Todo el mundo bebe cerveza y a cualquier hora del día. Te miran mal si pides una cerveza y el tamaño de la jarra no es por lo menos el "half", es decir 1/2 litro. No entendemos muy bien como aguantan, porque suelen beber sin comida de por medio.
Nosotros necesitábamos acompañar las cervezas con la otra gran tradición Bávara: Las salchichas. ¡Qué buenas están!
Uno de los mayores placeres de los que puedes disfrutar es una buena jarra de cerveza bien fresquita, una salchicha en su pan con su ketchup y mostaza y tomártela en una terraza al aire libre.
"Chimirrutezes"
¿Qué es esto?, es el nombre que le dimos a todas las "pijadas" y regalitos varios que te encuentras por los pueblos de Baviera. Normalmente realizadas a mano y sobre todo trabajadas en madera. Desde adornos para el jardín, hasta los más sofisticados relojes de cuco pasando por todo lo imaginable para decorar tu casa en Navidad.
¡Cómo en España no se come en ningún sitio! Se nos cayo el mito
En Baviera se come muy bien. Fue uno de nuestros grandes descubrimientos. Puedes encontrar por todos lados platos elaborados tanto de carnes como de pescados y a un muy buen precio. Por regla general hemos comido y cenado en restaurantes a un precio más barato que en España.
La gente es amable, pero el "sorry" no existe
Otro de los grandes descubrimientos fue lo amable que es la gente. A cualquier persona que preguntamos o nos atendió, se desvivía por ayudarte.
Otra cosa es pedir disculpas, esa palabra no debe existir en Alemán. Ya te pueden dar el empujón mayor del mundo o chocarte con cualquier persona, que ni se inmutan y por supuesto no hay ningún tipo de perdón que pedir.
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