Brasil - Mercado municipal de Sao Paulo

En Sao Paulo hay pocas atracciones turísticas, pero el Mercado Municipal es una de ellas. Está situado cerca de San Bento, en una de las zonas más bulliciosas de la ciudad durante el día.

Mercado municipal de Sao Paulo

Camino del mercado descubrí los tres tipos de edificios que hay en Sao Paulo (y no hay termino medio):

• Los nuevos.- Grandes edificios de cristal, impecables e imponentes.
• Los viejos.- Edificios decrépitos y sin lustre.
• Los antiguos.- Son edificios históricos, de bonita arquitectura y bien conservados. El mercado municipal está en esta categoría. Fue construido a principios del siglo pasado y conserva ese aire antiguo, pero no viejo.

Otra cosa que me llamó la atención, es que en la misma zona te encuentras edificios de todos los tipos, es decir, un imponente rascacielos de cristal con centro comercial en su interior, junto a un edificio cochambroso al lado.
Para llegar hasta el mercado, lo mejor es cogerse el metro. Linea azul hasta San Bento o linea amarilla hasta la Luz.

Lo primero que me llamó la atención es que apenas huele a comida, a pesar del calor que hacía. Después de visitar más de un mercado, tenía interiorizado ese olor a pescado más o menos desagradable.

Estuve recorriendo los diferentes puestos de la planta baja, y lo que más me llamó la atención es la gran cantidad de "casquería" que había. Hígados de vaca, estómagos impecablemente blancos, "pezuñitas", etc.
Pero lo más llamativo son los puestos de frutas. Tengo que reconocer que había tanta cantidad y variedad que la mayoría de las frutas ni las conocía. Me decidí por comprar una porción de piña, tenía una pinta pálida muy sospechosa, pero la dependienta me aseguró que estaba muy dulce. Y efectivamente, a pesar de la pinta que tenía, fue la piña más dulce que hasta entonces había probado. Después de algún tiempo en Sao Paulo, me he dado cuenta que toda la fruta es muy dulce, según me cuentan, aquí la fruta madura en el árbol y no durante el trayecto en barco hacia los mercados europeos.
Después de mi tentempié de piña, continué paseando entre los puestos y llegué a la zona de los pescados. Allí descubrí el por qué este mercado no huele a pescado. Casi no había puestos de pescado fresco, la mayoría eran puestos de pescados en salazón, sobre todo bacalao ... toneladas de bacalao



El mejor Pastel de bacalao y bocadillo de mortadela de Sao Paulo
Después de recorrer la parte de los puestos, me dispuse a probar lo típico que todo el mundo come en el mercado: El pastel de bacalao y el bocadillo de mortadela.

Pastel de Bacalao

Me senté en una especie de chiringuito, con sillas en la barra y donde la gente iba y venía a comprar sus porciones.
Me pedí un pastel de bacalao con un "suco de abacaxi". El pastel de bacalao es una especie de empanadilla gigante rellena de bacalao desmigajado. La empanadilla está frita y te la sirven recién salida del aceite. Después de un buen rato logré acabarmelo, terminé lleno y no volví a comer nada hasta la noche, y fue una fruta.
Mientras me comía el pastel de bacalao, estuve viendo como hacían el bocadillo de mortadela. En una plancha caliente ponían unos 200 gr de mortadela y 4 lonchas de queso. Todo eso se fundía y se mezclaba, soltando la grasilla del queso y de la mortadela. Cuando estaba mezclado, habrían un trozo de pan y lo metían dentro. No soy un experto nutricionista, pero eso debería de tener unas mil calorías.
Después de terminar el pastel de pescado, y viendo la bomba calorífica del bocadillo, decidí dejar para otro día la mortadela.

Salí del mercado y me fui paseando hasta el metro, recorriendo los alrededores, donde había infinidad de puestos, tanto en la calle como en los garajes de los bajos de los edificios.

Fue curiosa la experiencia y es una forma de meterte en la idiosincrasia de Sao Paulo.